Partimos de un enfoque comprensivo de las dificultades humanas, que huye de las etiquetas diagnósticas meramente descriptivas. Analizamos la sintomatología como una herramienta adaptativa de las personas con las que trabajamos ante las difíciles situaciones que les ha tocado enfrentar en la vida; partimos del respeto y comprensión de dichas estrategias, y de la promoción de otras nuevas que no estén fijadas a los contenidos traumáticos vividos.
Lo hacemos desde una mirada integral, ecosistémica y relacional, utilizando técnicas ajustadas a la edad de cada paciente, valorando las circunstancias de cada caso y el momento vital en el que se encuentren, diseñando un plan de intervención que se ajuste a sus necesidades. Las intervenciones se complementan con la colaboración de recursos vinculados con el paciente en su día a día.
Infancia, adolescentes y familia
Asesoramos y acompañamos a familias y a niñas/os y adolescentes en momentos de crisis como duelos, miedos, dificultades emocionales, impulsividad, aislamiento social, adicciones, agresividad, procesos adoptivos y de acogimiento familiar.
Personas Adultas
Ofrecemos acompañamiento emocional y psicoterapéutico a personas adultas con experiencias traumáticas, tristeza, fobias, déficits en habilidades sociales, maltrato, conflictos en relaciones de pareja, en relaciones laborales, familiares.
Profesionales
Ofrecemos un espacio destinado a compartir con otros y otras profesionales nuestra experiencia profesional, ofreciendo formaciones y supervisiones relacionadas con desarrollo, protección, buen trato, crianza, acogimiento familiar.
“Cuando se revive el trauma, el lóbulo frontal deja de funcionar, incluyendo la región necesaria para poner palabras a los sentimientos" Van der Kolk, 2015
Asesoramiento familiar
Un acompañamiento más puntual en momentos de crisis, que no requieran una intervención terapéutica profunda.
Terapia con niños, niñas y adolescentes.
Nuestro trabajo con niños, niñas y adolescentes, se centra en crear, apoyar y fortalecer los recursos y estrategias que necesitan para poder afrontar las dificultades de su día a día. Entendemos que muchas de estas dificultades, no son mas que intentos disfuncionales de adaptarse a una situación compleja que no saben resolver. Con el apoyo terapéutico, desde el respeto a sus ritmos y con técnicas adaptadas a su momento evolutivo, y caracaterísticas individuales, pretendemos acompañarles/as en el análisis de su experiencia, pudiendo desarrollar nuevas formas de enfrentarse a las situaciones vitales complejas.
Consideramos el juego y la creación artística/simbólica como elementos de expresión, elaboración y superación más allá del intercambio dialectico clásico. Ofrecemos elementos lúdicos y herramientas proyectivas como la caja de arena con el fin de facilitar la expresión de los conflictos y recursos disponibles en cada uno/a de nosotros/as. En este proceso, la participación de las principales personas cuidadoras, es fundamental, para que de esta forma, el abordaje terapéutico sea más integral y ecológico.
Terapia de familia y pareja.
Desde la Terapia Familiar ofrecemos una reflexión relacional y sistémica, donde tanto los miembros de la familia como la pareja podrán llegar a una comprensión relacional de su comportamiento y cómo este afecta a las demás personas de su entorno. De este modo, y al hacerse cada uno responsable de sus propias emociones y conductas, puede llegar a generar un cambio en la relación y por tanto en el bienestar propio y común. Desde esta óptica, la Terapia de Familia es aplicable y recomendable en cualquier momento de crisis vital de la familia o la pareja, ya que contribuirá a la no aparición de síntomas en los miembros de la familia, a desarrollar una nueva estructura familiar y/o de pareja, que permita el crecimiento de sus integrantes y por último a la creación de una nueva visión de la realidad familiar o de pareja, que generará nuevos cambios tanto en los patrones de comunicación como en la resolución de conflictos .
Traumaterapia.
La traumaterapia sistémica se recomienda para el tratamiento de niños/as, adolescentes y adultos/as afectados/as por procesos traumáticos, traumas tempranos y/o complejos y/o acumulativos.
Engloba diferentes niveles de intervención terapéutica como el tratamiento de las consecuencias de los traumas, apoyo a la marentalidad/parentalidad terapéutica de los/las cuidadores/ as y la colaboración y apoyo a los miembros de la red social afectiva del niño/a.
La traumaterapia infantil sistémica consiste en una evaluación comprensiva del niño/a, cuidador/a y contexto, la construcción de una relación terapéutica (apego terapéutico), una metodología coherente con técnicas basadas en las necesidades singulares de los niños/as y adolescentes traumatizados,consistente en tres bloques de orden neurosecuencial, y un apoyo y promoción a la resiliencia.
Asesoramiento a profesionales.
Somos conscientes también de la dureza del trabajo que desempeñan los y las profesionales del ámbito de protección y atención a la infancia, por las difíciles decisiones que adoptan y por el escaso reconocimiento social e institucional que todavía existe sobre nuestro trabajo, pero sobre todo, somos conscientes del riesgo que supone trabajar a diario con el trauma complejo, y de las altas probabilidades que existen de verse afectados/as por el trauma vicario, al poner toda nuestra empatía al servicio de los/as más dañados/as. Es por eso que ofrecemos un servicio de apoyo y acompañamiento psicoterapéutico para todos los /las profesionales que enfrentan esta difícil tarea, con el fin de prevenir o paliar el burn out, que puede desembocar en el abandono de grandísimos/as profesionales de los recursos públicos dedicados a la protección y atención a la infancia.
Psicoterapia individual para personas adultas.
Ofrecemos acompañamiento emocional y terapéutico a las personas adultas, tanto en momentos de crisis evolutivas, rupturas, duelos, experiencias traumáticas o conflictos relacionales que les generen malestar emocional (síntomas) y les impide tener un funcionamiento adaptativo.
Desde un enfoque integrador y ecosistémico, basado en el conocimiento de la propia persona y la relación de confianza y aceptación, se pretende fomentar la comprensión de uno/a mismo/a y sus mecanismos de funcionamiento, para poder promover un cambio personal que genere una mejor gestión emocional y relacional.